Me dijeron que el balonmano no vendía, y he visto pasar otra temporada en la que el balonmano ha vendido y mucho. Otros 10 meses de competición en los que el balonmano, ha vendido en todo el mundo. Me dijeron que el balonmano no vendía, y estaban equivocados.

Me dijeron que el balonmano no vendía, y he visto como el Lanxess Arena de Colonia acogió más de 25.000 espectadores el fin de semana en el que se juega la Final4 de la Champions League masculina. Por si fuera poco, el Papp Laszlo Arena de Budapest acogió más de 5.000 aficionados el fin de semana que se disputa la Final4 de la Champions League femenina.

Me dijeron que el balonmano no vendía, y he visto como los diarios deportivos más importantes como son Marca (España), L’Equipe (Francia) o Nemzeti Sport (Hungría), se han hecho eco de las noticias del balonmano dedicándoles unas impresionantes portadas.

Me dijeron que el balonmano no vendía, y he visto como el Hamburg Handball, que milita en la 3ª División alemana, tiene una media de 3.606 espectadores en cada partido que juega de local.

Me dijeron que el balonmano no vendía, y he visto como la ciudad de Nantes se tiñe de morado cada vez que su equipo juega un partido importante. Además de abarrotar el ‘Trocadiére’ con camisetas moradas, los tranvías y los autobuses de la ciudad también los adornan con fotos del equipo anunciando el encuentro.

Me dijeron que el balonmano no vendía, y he visto como la final del EHF Euro 2018 que jugaron España y Suecia fue la emisión más vista del día en TVE1 batiéndo así el récord de televidentes de un campeonato de Europeo. El encuentro tuvo una media de 2.573.000 telespectadores, pero al menos 7.300.000 de personas conectaron con el partido en algún momento. El minuto de oro lo marcó el pospartido, con 4.188.000 de espectadores (16,3% de share).

Me dijeron que el balonmano no vendía, y he visto pasar otra temporada en la que el balonmano ha vendido y mucho. Otros 10 meses de competición en los que el balonmano, ha vendido en todo el mundo. Me dijeron que el balonmano no vendía, y estaban equivocados. Solo hay que saber venderlo.